¿Se podía imaginar alguien hace 5 o 6 años el empujón tan grande que iban a tener las aventuras gráficas hoy en día€ De un género al que muchos han etiquetado como 'muerto' o 'desfasado', es asombroso ver cómo se suceden nuevos anuncios cada poco tiempo. En estos años tan prolíficos, se puede observar claramente cómo un gran porcentaje de las aventuras están naciendo en Alemania, amparadas la mayoría en una distribuidora totalmente dedicada al género y a la que muchos le estamos agradecidos: dtp/Anaconda.

Pero, mientras en el país de las salchichas y las cervezas todos son felices y comen perdices, aquí los españolitos tenemos que conformarnos con las pocas que deciden distribuir los editores en nuestras tierras, saliendo con un significativo retraso respecto a su país de origen y, en ocasiones, ni eso. Tony Tough 2, Ankh: Heart of Osiris o Belief & Betrayal, por poner un ejemplo, se han quedado en el camino. Y qué decir del sonado caso Runaway 2... pero no nos engañemos: olé por los que ponen pasta y ganas. Hasta hace bien poco parecía que "Undercover: Operación Wintersun" iba sumarse al carro de las que nunca llegarían, hasta que el pasado 29 de mayo, Planeta DeAgostini nos sorprendía con el inesperado anuncio de su distribución. Ahora que ya se encuentra en las tiendas a un excelente precio, qué mejor momento para saber lo que nos depara este juego de espías.

Albores de la 2ª Guerra Mundial, enero de 1943. El científico británico John Russell recibe una inesperada llamada: el Servicio Secreto Británico desea ponerse en contacto con él para que confirme la autenticidad de unos planos que han encontrado, los cuales podrían indicar que los nazis alemanes están desarrollando un arma extremadamente mortífera. Tras confirmar su veracidad, John es enviado a Berlín junto a un agente especializado, Peter Graham, para encontrar el prototipo y desarticularlo.

Sabida la naturaleza torpe y poco dada al espionaje del Doctor Russell, la misión se antoja difícil. En cuanto llegue a Berlín, John se verá metido en problemas con las SS, tendrá que infiltrarse en edificios y lograr dar con el paradero del prototipo de la bomba, con la ayuda de una inesperada visita: la también agente secreta británica Anne Taylor. ¿Podrán salvar el mundo€

En "Undercover: Operación Wintersun" nos encontraremos con el famoso patrón de fondos prerrenderizados en 2D y personajes modelados en 3D, combinación que consigue unos efectos preciosistas y grandes resultados estéticos.

Los fondos están por lo general bastante bien trabajados, si bien se nota un aumento de calidad llegando a la parte final del juego, en la que disfrutar de Stalingrado totalmente arrasada es una delicia para los ojos, como se puede apreciar en la imagen. Lo que sí sucede a veces es que notaremos que los fondos están poco definidos y se echa de menos un poco más de esmero en su realización. También pasan con nota los personajes: los rostros (no tanto expresiones faciales, ojo, que hay bien pocas) resultan tremendamente realistas y bien modelados, como se puede observar en nuestro protagonista, con unas orejas perfectamente dibujadas, su barba de pocos días, algunos pelos canosos o sus gafas intelectualoides. Por contra, el diseño corporal ha sido más dejado de lado, con unas texturas y un modelado más bien suficientes.

En cuanto a animaciones, también se puede ver bastante realismo en los movimientos del personaje, aunque son bastante limitados: no hay más que ver la forma de correr de Graham, mucho menos "sofisticada" que lo que estamos acostumbrados a ver. El resto de animaciones en los escenarios es más bien escaso: algún animal que se mueve, las banderas ondeando y el movimiento de las nubes son de las pocas observables, al contrario que otras aventuras como Secret Files: Tunguska. Respecto a las cinemáticas, creo que no me equivoco si digo que hay cuatro como máximo, las cuales aparentemente pertenecen al motor del juego pero, si observamos mejor, se tratan simplemente de archivos de vídeo de Windows, por lo que tendremos que tener instalado Windows Media Player para poder jugarlo en condiciones. Un incordio para los que no queremos instalar más de lo necesario. Para rematar el apartado, me gustaría comentar que las sombras están perfectamente logradas: cambian en función de la cantidad de luz incidente y de su ángulo, se fusionan muy bien con los escenarios... un lujo.

Como curiosidad, debo mencionar que el juego nos permite varios niveles de antialias, resoluciones altas de pantalla 4:3 o 5:4 y un interesante filtro sepia para visualizar el juego como si se tratase de una fotografía antigua.

Como viene siendo habitual, Planeta DeAgostini nos ofrece un juego doblado y traducido al castellano. Omito adrede la palabra "totalmente" puesto que no es así: las voces del protagonista y demás personajes sólo se escucharán en diálogos o cinemáticas, debiéndonos conformar con unos simples subtítulos cuando el personaje observe el entorno, cuando no sucede así en la versión original. Esto mismo pasaba con otra de sus ediciones, Scratches: La guarida del miedo, donde "quizá" era un poco más perdonable visto su tinte amateur, pero me sigue pareciendo increíble que otro de sus juegos editados pero de ínfima calidad, Lula 3D, viniera completamente doblado, incluidas descripciones. Ver para creer.

En cuanto a la calidad del doblaje, a pesar de no reconocer de oídas a alguno de los dobladores más comunes de videojuegos, se puede decir que es bastante buena: las tonalidades de voz encajan con cada personaje y se ve un buen trabajo; únicamente la voz del espía inglés Peter Graham deja un poco que desear. El apartado musical cumple su papel, envolviendo de forma correcta a la aventura: en las escenas de tensión o sigilo la música se tornará más fuerte, y en el momento de pasar un punto clave del juego podremos apreciar un cambio de melodía más sereno. Asimismo, contaremos con los típicos efectos sonoros: trinos, aperturas de puerta y cajones, chisporroteo de fuego, pisadas, etc.

"Undercover: Operación Wintersun" emplea una perspectiva en tercera persona e interfaz point 'n' clic, al más puro estilo clásico. Igual de clásico se nos presenta el inventario, ubicado en la parte inferior de la pantalla y que aparecerá únicamente si desplazamos el ratón hacia esa zona, estilo Broken Sword, dejándonos el resto del tiempo una pantalla con franjas negras arriba y abajo, como si se tratase de un filme panorámico. Además, es posible la combinación entre objetos (en algunas de ellas importa el orden) del inventario, pero debido a su gran número se hace en ocasiones tedioso.

Una cosa curiosa es que "Undercover" rompe con el patrón clásico de botón izquierdo=acción, botón derecho=observación. Pues no. Aquí se tornan los papeles, y con el botón izquierdo nuestro personaje comentará los objetos del entorno y con el derecho realizará acciones o interactuará con personajes. Como esto puede resultar algo extraño para el aventurero veterano, en el propio menú de configuración del juego existe una opción para invertir dichos botones, con lo cual ya podremos disfrutar de la aventura sin equivocarnos. En cuanto a los cursores, aparecerá un pequeño icono modificando la flecha del cursor estándar, apareciendo una llave inglesa cuando se puede ejercer una acción sobre el objeto, una acción cuando se ha encontrado una salida, un bocadillo cuando podemos establecer un diálogo y una claqueta en aquellas secuencias cinemáticas o animaciones que no podemos interrumpir. Si lo que deseamos es hablar con un personaje, tras haber clickeado en él la franja negra superior de la pantalla se expandirá, y es ahí donde aparecerán las frases a escoger, que se sombrearán en gris una vez que ya las hayamos pronunciado.

Algo que probablemente hayan leído nuestros lectores y les ha echado para atrás a la hora de comprar "Undercover" es la existencia de partes de sigilo (¡maldita manía!) y de partes que han de hacerse contrarreloj. Afortunadamente, tampoco es para echar sapos y culebras, ya que será en un par de momentos puntuales y volveremos a la aventura de siempre. Sin embargo, en alguno de estos momentos sufriremos momentos de estrés al quedarnos estancados, ya que el juego resulta bastante lineal y, además de no poder movernos en un rango más amplio de 4 o 5 escenarios por fase, tendremos que resolver las partes de sigilo a la fuerza o no progresaremos.

Otra de las características de esta aventura y que, por fortuna, se va imponiendo para ayudar a los aventureros inexpertos (y no tan inexpertos), es un sistema de ayuda opcional sólo disponible en el modo "Principiante", accesible desde el menú de configuración. Si elegimos este modo, al pulsar la tecla de "retroceso" se visualizarán todos los puntos calientes del escenario, de forma similar a Secret Files: Tunguska. Además, pulsando la tecla "tabulador" podremos ver todas las salidas del escenario; acción siempre útil que se agradece cuando estamos atascados.

A simple vista se podría decir que es un apartado de jugabilidad aceptable, sin nada que moleste demasiado al jugador... y realmente así es: clásico, cómodo, y sin estridencias. Pero no podía acabar el apartado sin hacer mención al atractivo del juego, y es que sería una terrible injusticia hacer que este juego saliera de rositas, puesto que el objetivo de un videojuego siempre es ENTRETENER y este no lo consigue. Sí, parte de un argumento en principio interesante, pero los acontecimientos se van sucediendo sin más, las investigaciones resultan monótonas, las partes de sigilo aborrecibles y no se respira emoción por ningún lado. En conclusión: a mitad del juego la historia va perdiendo enteros, el jugador va perdiendo interés y las horas finales de juego sólo son un pretexto para terminar tal sosería de aventura y comenzar con la siguiente.

¿Qué es lo que más puede frustrar a un jugador de AG's€ Para mí las respuestas son claras: 1, bugs; 2, fallos de traducción; 3: píxel-hunting. Y es que, amigos, si te toca resolver un puzzle cuya respuesta sólo la encuentras en las guías o llamando a un servicio técnico/de pistas debido a un error de traducción, te dan ganas de ir con tu ticket a la tienda a exigir la devolución del juego. ¿Por qué he de saber yo otro idioma para resolver un enigma que corresponde a iniciales de palabras en alemán€ "Afortunadamente" sólo hay uno de estos errores de traducción, pero ya es suficiente para cabrear al aventurero al tener que tirar de guía para seguir adelante.

En este juego encontraremos puzzles de todo tipo: de inventario, de combinatoria, contrarreloj y de sigilo. Los de inventario no deberían suponer ningún problema, ya que son bastante asequibles a cualquier nivel, si bien es cierto que en algún momento el píxel-hunting nos tocará la moral y pondrá a prueba nuestra capacidad de observación. Si se presta la debida atención a las pistas que nos suministran en los de tipo combinatoria o contrarreloj, sólo tendremos que discurrir un poquito y tomar lápiz y papel para resolverlos; sin embargo, los de sigilo es una cosa aparte. Al contrario de Dreamfall, donde podíamos tener una alternativa más "aventurera" si no queríamos acción, aquí tendremos que realizar las pruebas de sigilo sí o sí. Este tipo de enigmas llevan bastante tiempo de realización ya que, si nos pillan, deberemos realizar otra vez la prueba desde cero. Todo un incordio.

En resumidas cuentas, contamos con diferentes picos de dificultad en el juego, si bien yo la consideraría, en términos generales, media. Ciertos puzzles, como el de los archivos con Anne y John, acaban desesperando; otros parecen un insulto a nuestra inteligencia y otros son normalitos. Para todos los gustos, vaya.

Si hay algun adjetivo que pueda definir a "Undercover", ese es sin duda 'soso'. Es una pena que un juego que viene con tan buenos ingredientes acabe perdiendo fuelle de tal forma. De algún modo, la frialdad alemana está plasmada en este juego sin emoción, al que se coge con ganas pero al que se termina aborreciendo de mala manera por sus personajes sin carisma, el lento desarrollo y un maremágnum de detalles muy mal interconectados.

Podría haber sido un buen juego, y tanto que sí. Pero hay algo de lo que no deben olvidarse los desarrolladores: como he comentado antes, el principio más básico que busca cualquier jugador, sea aventurero, rolero, o lo-que-sea-ero es DIVERTIRSE, y es ahí donde falla "Undercover: Operación Wintersun". No creo que la temática bélica implique que deba ser un juego muy serio, o, por lo menos, aburrido; puede que próximas aventuras como A Stroke of Fate o Undercover: Dual Motives, precuela de la que hoy analizamos, nos lo demuestren. Mientras, a esperar tocan.

Escrito por rosela

Publicado el 05 de septiembre de 2007

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